jueves, diciembre 06, 2007

...

Tus manos toman este pequeño espacio
y sin esfuerzo hacen aparecer una ventana
donde sólo existía un muro.

Si de pronto ya no estuvieras,
nada podría llenar el espacio
que dejaría el color de tus ojos.

Si de pronto tu voz desapareciera,
el recuerdo de tus palabras
aparecería en el trinar de los pájaros.

Jigme Shelri